¡Tener un vestidor es el sueño de toda mujer! ¡Y también de muchos hombres! Además no está reñido con una casa pequeña, hay muchas ideas para crear el tuyo con espacios reducidos. Si tienes una habitación libre o simplemente un espacio disponible en tu casa Rucapri, no lo dudes, es el hueco perfecto para crear tu vestidor.
Te dejamos unas claves para que hagas el tuyo.
¿Cómo es el vestidor perfecto para tu casa?
Los accesorios y prendas que más uses ponlos siempre a tu alcance. Coloca en las barras superiores las camisas y chaquetas, y en las inferiores, los pantalones y faldas. Y almacena en los estantes superiores la ropa de cama o de otra temporada.
Si tienes problemas de espacio, aprovecha la pared para colocar un panel para la bisutería o una barra con ganchos, podrás colgar pañuelos y bolsos, e instala un espejo en la parte interior de la puerta.
Separa por grupos: camisas o vestidos; lisos o estampados… cuantas más divisiones hagas, te será más fácil guardar, encontrar y mantener el orden. Coloca por colores y utiliza perchas iguales, ahorrarás espacio
¿Qué no puede faltar en tu nuevo dormitorio con vestidor?
- No hay vestidor sin espejo, y si puede ser de cabeza a pies, mejor. Elige uno que encaje con la decoración que le des al dormitorio.
- La iluminación es un aspecto muy importante, ya que influye en cómo te verás en tu nuevo vestidor, lo usual es utilizar colores de luz más blancos que cálidos, pero para gustos, ¡vestidores!
- Elige tableros y separadores que aporten luminosidad al ambiente, pues puede que si el vestidor no tiene ventanas de una sensación claustrofóbica.
- Las cajas serán tu mejor aliado, ya que puedes meter en ellas todo lo que no quieres que esté a la vista.
Las ventajas de los vestidores abiertos
- Es una fuente de inspiración: como te decíamos antes, ver toda tu ropa expuesta y ordenada te facilitará mucho responder a la pregunta «¿qué me pongo hoy?». Ordena tu vestidor por colores o por tipos de prenda e instala un espejo de cuerpo entero para probarte todos tus modelitos sin tener que salir de la habitación.
- Ayuda a mantener el orden: a todos nos ha pasado. No encuentras esa camisa por ningún sitio o un día, haciendo limpieza, descubres que tenías unos pantalones negros casi idénticos a los que te acabas de comprar, pero estaban… Sí, exacto: en el fondo del armario. Con un vestidor abierto esto no te volverá a pasar, ya que todo está a la vista y, con la luz encendida, es mucho más fácil de encontrar. Por supuesto, también está la otra cara de la moneda: tener un vestidor abierto te ayuda a mantener el orden, pero también te obliga a hacerlo… Ya que, si no es así, el desorden quedará totalmente a la vista.
- El asunto de la limpieza también supone una pequeña desventaja: los armarios no son inmunes al polvo, como bien sabemos, pero el hecho de ser un espacio muy reducido y que dispone de dos puertas cerradas en todo momento hace que quede más protegido del polvo. En el caso del vestidor no es así, así que no olvides pasar un trapo o un plumero por encima de las perchas y de los cuellos de camisas, vestidos y chaquetas cuando hagas la limpieza semanal.