La energía solar térmica es una de las formas más populares de energía renovable utilizada en todo el mundo. Esta tecnología convierte la energía solar en calor para calentar agua y otros fluidos, siendo uno de sus usos más comunes generar agua caliente sanitaria en los hogares y edificios.
La energía solar térmica para agua caliente sanitaria funciona mediante la instalación de paneles solares térmicos en el tejado o en otro lugar donde puedan captar la mayor cantidad de radiación solar posible. Estos paneles están diseñados para absorber la energía solar y convertirla en calor, que a posteriori se utiliza para calentar el agua que se almacena en un depósito acumulador.
Los paneles solares térmicos suelen estar compuestos por una serie de tubos metálicos que contienen líquido refrigerante. Este líquido se calienta cuando los rayos del sol lo golpean, lo que a su vez calienta el agua que circula a través de un intercambiador de calor. A pesar de que la energía solar térmica puede producir suficiente agua caliente para satisfacer la mayoría de las necesidades de un hogar, es necesario contar con un termo eléctrico para proporcionar un apoyo adicional en los días nublados o cuando la demanda de agua caliente es mayor.
Un termo eléctrico es un aparato que utiliza electricidad para calentar agua. Se compone de un tanque de almacenamiento y un elemento calefactor, que calienta el agua a medida que fluye a través del tanque. El termo eléctrico se utiliza generalmente como apoyo de la energía solar térmica, y se enciende automáticamente cuando el agua almacenada en el tanque de la energía solar térmica no es suficiente para satisfacer la demanda. La combinación de la energía solar térmica y un termo eléctrico puede ser una solución muy eficiente y económica para producir agua caliente sanitaria.
Pero ¿cuáles son sus ventajas? Aquí te presento algunas de las más relevantes:
1. Ahorro de energía y dinero: La energía solar térmica es una fuente de energía gratuita e inagotable, lo que significa que puede ayudarte a reducir tus facturas de energía y ahorrar dinero a largo plazo. Además, como la energía solar térmica no emite gases de efecto invernadero ni contaminantes, también ayuda a reducir el impacto ambiental de la producción de agua caliente sanitaria.
2. Fiabilidad: Los sistemas de energía solar térmica son muy fiables y pueden durar muchos años con un mantenimiento mínimo. Esto significa que no tendrás que preocuparte por el reemplazo constante de piezas y componentes, lo que te ahorrará tiempo y dinero a largo plazo. Además, al llevar incorporado un termo eléctrico de apoyo, te aseguras de que el agua esté a la temperatura deseada aunque las condiciones meteorológicas no hayan sido buenas.
3. Fácil instalación: La instalación de un sistema de energía solar térmica para agua caliente sanitaria es relativamente sencilla y no requiere grandes cambios en la estructura del hogar o edificio. Los paneles solares térmicos se pueden instalar fácilmente en el techo o en otro lugar donde reciban la mayor cantidad de radiación solar posible.
4. Adaptabilidad: La energía solar térmica se puede adaptar a cualquier tamaño de hogar o edificio, desde una pequeña casa hasta grandes edificios comerciales. Esto la convierte en una opción muy versátil y accesible para todos los tipos de viviendas.
5. Durabilidad: Como ya hemos comentado, los sistemas de energía solar térmica están diseñados para durar muchos años, lo que significa que son una inversión a largo plazo. Con un mantenimiento mínimo, los paneles solares térmicos pueden durar hasta 30 años o más.
6. Aumento del valor de la propiedad: La instalación de paneles solares térmicos puede aumentar el valor de una propiedad. Además, muchos compradores de viviendas prefieren hogares que cuentan con tecnologías de energía renovable instaladas, lo que puede hacer que la propiedad sea más atractiva en el mercado.
En conclusión, la energía solar térmica es una tecnología eficiente y rentable para producir agua caliente sanitaria. Al combinarla con un termo eléctrico, se puede asegurar un suministro constante de agua caliente en todo momento, reducir el consumo de energía y ayudar a proteger el medio ambiente. Actualmente en las viviendas de nueva construcción la normativa vigente exige su instalación, pero si tu vivienda ya está edificada y estás buscando una forma de reducir tus facturas de energía y contribuir a un futuro más sostenible, la energía solar térmica con apoyo de termo eléctrico puede ser una excelente opción para ti.
