Los pequeños detalles se han convertido en grandes claves a la hora de elegir nuestro futuro hogar, tanto es así que cuestiones como la estética o la elección del mobiliario están a la orden del día. Del mismo modo, la situación geográfica es otra de las cuestiones que ha ganado gran relevancia y, por ello, es la que nos disponemos a desgranar hoy en nuestro blog.
El punto cardinal hacia el que mira la vivienda determinará la calidad de vida que se tenga tanto dentro como fuera de ella. Entre otras muchas cosas, dependerá de ello la existencia de dependencias excesivamente frías o calurosas que requerirán de un gasto energético extra para suavizarlas. Además, a la hora de tasarla o de pedir hipoteca, esa ubicación también determinará el valor más alto o bajo del inmueble.
Orientados a la mejor calidad de vida
La definición de orientación nos dice que es la posición de la vivienda respecto a la posición del Sol y, dentro de la arquitectura, encontramos un sector que se encarga específicamente de esto: el asoleamiento; ámbito del que depende el estudio de la cantidad de luz natural que obtendrá un edificio según la situación de la vivienda.
A efectos prácticos, el Sol nace por el Este, se pone por el Oeste y, además, se inclina hacia el Sur. Asimismo, el comportamiento de la estrella solar está marcado por la ubicación de nuestro planeta o la época del año en la que nos situemos. Por ejemplo, en invierno incide más oblicua y horizontalmente respecto a los meses de verano en los que es mucho más vertical.
De esta forma, al ubicarnos en España, debemos entender la diversidad de nuestro clima como un factor trascendental a la hora de elegir vivienda. En invierno contamos con días cortos y una trayectoria solar que va del Sureste al Suroeste, no recibiendo la orientación Norte rayos de manera directa. Primavera y otoño son las etapas donde, en cambio, el Norte comienza a recibir algunos rayos al principio y al final del día, para acabar en verano recibiéndolos tanto por la mañana como por la tarde.
Entonces, ¿cuál sería la orientación predilecta según nuestra posición geográfica?
Las mejores situaciones
Situación Sureste
Para climas cálidos, como suele ser el mediterráneo, esta orientación permite interesantes beneficios. Toda la luz es recibida a lo largo de la mañana y nos ayudaría a evitar la incidencia en las horas más calurosas de la jornada.
Mediante esta elección podríamos reducir la temperatura en las horas más críticas a la par que disfrutamos de la luz natural de la mañana, mientras que el uso de cortinas y toldos pueden ser elementos importantes para evitar un posible exceso de claridad a determinadas horas. No obstante, también es cierto que en periodos como el invierno tendríamos que contar de manera intermitente con la calefacción en climas más fríos.
Situación Sureste
Los rayos solares inciden sobre la casa en las últimas horas del día y, por ello, esta situación sería la idónea si buscas mantener la vivienda climatizada y con una mayor luz natural. Y, aunque este calentamiento del hogar a últimas horas del día pudiese provocar que tuviéramos que usar el aire acondicionado en verano para evitar que se termine caldeando toda la casa por la tarde; en invierno, por el contrario, no sería necesaria la calefacción.
Finalmente, como podéis ver, no existen orientaciones ideales, pero sí que tenemos las que más se acerquen a nuestras necesidades. En Rucapri, tratamos de situarnos del lado de la eficiencia energética, de tal forma que la mayoría de nuestras viviendas suelen tener situación Sureste y Noroeste.
Además, en nuestra obra nueva Residencial Cuesta del Merendero contamos con preinstalación de aire acondicionado, ventanas con aislamiento térmico y placas solares; pretendiendo, con ello, la existencia de una mayor reducción del consumo energético y una mejora en la calidad de vida de los habitantes.
Y tú, ¿qué orientación prefieres?
Para más información entra en nuestra web www.rucapri.es o llámanos al 954 86 17 17, estaremos encantados de atenderte.
